martes, 22 de octubre de 2013

Artanaca Blue Power!!!! (por Ignacio Heredia)

Este ha sido un fin de semana intenso para este que os escribe, pues el pasado sábado participé en la magnífica Marcha de la cueva del gato con una distancia de 44 kms en la vecina localidad de Benaojan. 

Bien pues tras tener que estar trabajando la noche del sábado y menos mal que amigos de Estepona me recogieron el dorsal ya que no me daba tiempo a recogerlo ya que salía del trabajo a las 7.30 horas haciendo la subida a Benaojan en un tiempo record y jugándola en más de una curva, pero en fin la cuestión es que pude llegar a tiempo para tomar la salida de esta gran carrera de la que os empiezo a relatar.

Todo comenzó a eso de las 8,30h cuando llegue al pueblo para encontrarme con los amigos y me dieran mi ansiado dorsal, gracias Antonio eres un crack, pues ya me puse a calentar un poco ya que hacia un poco de fresco aunque después tuvimos una agradable temperatura para practicar este bonito deporte, me fui para el cajón de salida para intentar pillar buen sitio pero ya había mucha gente y tuve que salir un poco retrasado. A las 9 en punto se dio la salida y comenzamos el camino por las calles del pueblo, ¡Vaya con las calles del pueblo y sus desniveles!!!!!

Pues justo al salir del pueblo los corredores que iban delante mía tiraron por un camino equivocado y perdimos no más de 500 más, pero que por ser prácticamente en el km 2 se nos coló mucha gente a la que tuvimos que adelantar en un difícil terreno de senderos técnicos y de dura subida, poco a poco y junto con un compañero fuimos quitándonos a gente pero sin saber cuántos iban exactamente delante de nosotros por eso decidimos tomar un ritmo alto para intentar coger al grupo de cabeza, pero hubo un momento en el que a lo lejos del camino ya no se veía a nadie y pensé que se nos habían ido demasiado lejos. 

Tras la dura subida comenzó una técnica bajada en la que mi compañero de carrera se me escapaba, no se fue mucho y lo pude coger al terminar la bajada. Pasando por el segundo avituallamiento nos indicaron que íbamos muy bien pero no nos especificaron posiciones y seguimos tirando a tope en los llanos de libar en los que nos desanimamos un poco pues había largas rectas donde no se veía a nadie delante de nosotros y nos desanimamos un poco y pensamos que ya se nos habían escapado demasiado, pero cual fue nuestra sorpresa cuando llegamos al tercer avituallamiento cuando le preguntamos a los voluntarios como íbamos y nos dijeron que éramos 2º y 3º, puffff que subidón nos entró al escuchar aquello y a mí se me vino a la cabeza si no pagaría el esfuerzo realizado para intentar coger a los que creíamos que teníamos delante, pero nada seguimos tirando en otra dura subida que incluso las motos de cabeza de carrera se quedaron por el difícil terreno donde transitaba, íbamos hablando el compañero y yo sobre el planteamiento de carrera para intentar asegurar las plazas así que el tiraba en las bajadas y yo en las subidas, hubo muy buen rollo en todo momento. Por fin llegamos al ecuador de la carrera y pasamos por Cortes de la Frontera donde la gente se portó genial con nosotros aplaudiéndonos y vitoreándonos cosa k nos subía aún mas aunque nos llegaban datos que el primero el gran David Navarrete se iba ya a 10 min de nosotros así que volvimos a organizarnos para pelear por los puestos en los que estábamos. Comenzamos la bajada hacia la estación de jimera y ya empezaba a notar las piernas un poco pesadas así que decidí dosificar un poco. 

Llegamos a un tramo precioso que transita junto al curso del rio de la cueva del gato y la vía del tren y ahí ya comencé a notar el cumulo de kms y empecé a pasarlo mal, bastante mal, tenía el cuerpo fatigado y notaba que me faltaba energía, pero no perdía la constancia incluso el compañero con el que llevaba toda la carrera se quedó atrás así que me quede un poco más tranquilo y también porque al adelantarnos las motos que se quedaron en la subida le pregunte que a cuanto tiempo llevábamos a la gente de atrás y nos dijo que lo llevábamos lejos así que era momento de correr con cabeza y no desperdiciar ni un gramo de energía pues ya estaba muy tocado, pero los abundantes senderistas que pasaban por ese bonito entorno y que no paraban de animar me daban fuerzas. 

Sin saber por qué punto kilométrico me encontraba y sin saber lo que me quedaba me encontré con el cartel del próximo avituallamiento y me lleve la grata sorpresa de que transitaba por fin por el km 37, que alegría me dio porque no podía aguantar ya mucho, las piernas doloridas y acalambradas, los atletas de atrás acercándose poco a poco y lo peor la subida de la cueva del gato que era terrorífica pero la afronte intentándolo dar todo pues ya me quedaban menos de 5kms de meta y no quería que después de ir toda la carrera segundo me adelantara nadie al final del recorrido así que me salió de dentro lo que yo llamo “ THE ARTANACA BLUE POWER” que me dio fuerzas para terminar la subida un poco preocupado porque al estar arriba vi al tercer clasificado a mitad de la subida pero decidí no mirar más hacia atrás y exprimir hasta en ultimo gramo de energía que me quedaba en el cuerpo, tras una bajada que se me hizo eterna entre en las calles de Benaojan, no me lo podía creer en la larga avenida no dejaba de mirar hacia tras para visualizar por donde venían hasta que me encontré con unos amigos del instituto y me comentaron que dejara de mirar hacia atrás que la segunda plaza era mía. 

Aquí quiero hacer un inciso aunque no sé como describir lo que en ese momento sentía, un mucho de cansancio, un poco de emoción y una alegría inmensa. Al acercarme a la meta unos chavales corrieron junto a mí que grandes me llevaban en volandas y allí estaba a 100 metros, la meta, con la plaza llena de gente aplaudiendo y dando ánimos. Hubo un momento en el que se me saltaron unas lagrimillas, supongo que de alegría mezclada con cansancio. Esta entrada la voy a tener en mi memoria para toda la vida.

Pd: Lo que si eche de menos es a teneros a vosotros cerca ya que no es lo mismo ir a una carrera sin ustedes, sois unos cracks compañeros.

Pues aquí se acaban estas humildes palabras de esta bonita experiencia que me he llevado este sábado, en la próxima más y mejor



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